En una entrevista ofrecida a un periódico provincial, la Alcaldesa isleña, María Luisa Faneca se despacha a gusto con lo que ella entiende como “una legislatura de aprendizaje”, dándose por satisfecha por todo lo conseguido, por encima de muchos municipios andaluces.
Ya de entrada habla de proyectos en plural, como si Isla Cristina hubiera recibido varias “escuelas infantiles” –solo una y la construyó la Junta por haber superado los 20.000 habitantes-, “un instituto” –se refiere a la ampliación aprobada en el mandato de los andalucistas (2006)-, “un gran conservatorio” –también un proyecto de la corporación anterior, modificado y convertido en un edificio que oculta el teatro-.
Ni el propio periodista se cree lo que la mandataria está diciendo y por este motivo le dice, y así lo escribe que “al final resulta que usted le está sacando partido a la crisis…”. Faneca le contesta que “hemos aprovechado esta situación económica (no dice crisis) “para ponernos al día”. Y los Andalucistas nos preguntamos en qué se ha puesto al día, en vivienda, en empleo, en la construcción del Parque Empresarial, en duplicar la plantilla poniendo en riesgo los sueldos de los que ya trabajaban, en endeudarse hasta niveles astronómicos, etc.
De momento, a estas alturas de la entrevista no ha hablado de nuestro principal sustento, la pesca, y sí de la única salida, según ella, que tiene el isleño, el turismo. Para la Alcaldesa, los isleños e isleñas están “desorientados”, por lo tanto “hay que orientarlos”. Orientar hacia dónde, o se referirá más bien a cambiarnos nuestro modo de vida, de hacer lo que hemos hecho siempre, lo que sabemos hacer y hacerlo bien, es decir, de pescar a cursillos de formación subvencionados por la Unión Europea mientras se decide qué hacer con las fracasadas políticas de pesca.
Mal camino lleva si está pensando en defender lo que le ordenan desde la Junta de Andalucía, más concretamente desde su ex Dirección General de Pesca sobre “el agotamiento de los caladeros” y de que “hay que buscar otros yacimientos de empleo”. A ver cómo le dices tú a un marinero de 40 o 50 años, que lleva toda su vida dedicado a la pesca, que a partir de ahora se tiene que ganar la vida de camarero en un chiringuito o de recepcionista en un hotel. Ni ella misma se cree lo que le está diciendo al entrevistador.
También habla de que “gracias a mis años en la gestión pública me han servido para dirigir una empresa como ésta”. Otra vez compara la gestión municipal con la de la Junta de Andalucía cuando ostentaba el cargo de Directora General de Pesca, con un presupuesto que le venía dado y lo único que tenía que hacer era gastarlo. Aquí, en el Ayuntamiento, se encontró con otra realidad, la de buscar y gestionar unos fondos con los que mantener la maquinaria municipal. Y para colmo, no solo no supo hacerlo -a la vista está la deuda acumulada de unos 30 millones de euros-, sino que aumentó los gastos cuando menos ingresos tenía.
En otro apartado de la entrevista habla que “el Ayuntamiento cuenta con tantísimos funcionarios…/…me llevo todo el día pensando cómo pagar las nóminas”, como si este hecho lo hubiera heredado. Los números no engañan, cuando los andalucistas dejaron el Ayuntamiento la plantilla municipal rondaba los 300 empleados, ahora hay 600 con un gasto mensual de 1 millón de euros de nóminas. Debido al aumento de estos gastos y ante la falta de dinero, se dejó de abonar durante un tiempo la Seguridad Social y el IRPF de los trabajadores, como fue puesto de manifiesto por los andalucistas en un pleno y reconocido por la propia Alcaldesa. Para Faneca, la solución pasa porque “tenemos que reflexionar y buscar salidas, pero entre todos, tanto los partidos de izquierdas y de derecha, porque hay que reajustar la gestión municipal”, es decir, ella nos mete en el problema y ahora le tenemos que buscar solución entre todos.
El entrevistador, tras oír todas estas cuestiones le pregunta que “con esta perspectiva, cómo se puede mantener a flote un ayuntamiento”, a lo que Faneca le responde “siempre reduciendo gastos”, y ya está. Y esto lo dice una alcaldesa que un mes si y el otro también no ha parado de solicitar créditos bancarios no inferiores a los 300.000 euros, excepto el de noviembre de 2010 que llegó a los 900.000 euros.
Casi finalizando vuelve a “vender” sus proyectos. Habla, por ejemplo, del Parque Empresarial prometido, publicitado y anunciado en multitud de ocasiones durante estos cuatro años y del que todavía no se ha puesto ni un solo ladrillo, sin embargo dice que “estamos trabajando”. Habla también de una pretensión andalucista, en concreto del anterior alcalde que se “empeñó” en abrir una línea de negociación con el anterior alcalde ayamontino para conectar, a través de un puente, la “Punta del Caimán” con la “del Moral”, y se lo adjudica como una idea nueva, innovadora y propia.
En la foto la alcaldesa de Isla Cristina del PSOE "según ella trabajando..."
