4 mar 2010

Los Andalucistas isleños celebraron el Día de Andalucía a las puertas del SAE

Durante dos horas, el Partido Andalucista de Isla Cristina, al igual que en el resto de Andalucía, quiso hacer patente la mala situación por la que muchos isleños e isleñas están pasando al encontrarse en el paro. Por tal motivo, se personaron a las puertas de la Oficina del INEM donde repartieron octavillas informativas.


El 28 de febrero de 1980 los andaluces y andaluzas conquistamos la autonomía para nuestra tierra. Hoy, 30 años después, la autonomía andaluza tiene el más grave de los problemas: más de un millón de personas en paro. No es posible la autonomía de la sociedad andaluza cuando un millón de sus miembros no tiene autonomía personal porque no tiene trabajo.



Hoy, en pleno siglo XXI, una de las reivindicaciones del pueblo andaluz de aquel 1980 sigue siendo la principal preocupación de Andalucía. Nuestra tierra está sufriendo de forma mucho más dura que otros territorios la crisis. Hay un millón de andaluzas y andaluces parados, el 27,73 % de nuestra población activa, y cerca de 300.000 hogares en los que todos sus miembros están en paro. En otros territorios como el País Vasco y Navarra, la tasa de paro no llega al 12%. La culpa no la tienen los parados andaluces sino el fracaso de las políticas del PSOE y del PP tanto en la Junta de Andalucía como en el Gobierno de Madrid, que no han servido a los intereses reales de Andalucía.

Los andalucistas ofrecemos una alternativa para la transformación radical de Andalucía que dé respuesta a los problemas del siglo XXI: desempleo masivo, crisis política, cambio climático, desigualdad territorial y social. Queremos poder y dignidad para Andalucía para que podamos construir nuestro propio destino, nosotros mismos, mediante más poder político y económico, más democracia, más cultura, mejor educación y más influencia en España, en Europa y en el mundo.

Andaluces de conciencia

Terminó este Febrero de este 2010 oscuro y lluvioso. Ha sido un mes intenso en el que hemos trabajado en el principal problema que tenemos los andaluces y andaluzas: el paro.

Los andalucistas entendemos lo que pasa en Andalucía porque somos, antes que nada, andaluces de conciencia. El andalucismo no es una etiqueta política ni una marca blanca que se puede juntar a cualquier otra, el andalucismo es entender y atender al pueblo andaluz, no utilizarlo para cosechas electorales como pretenden el PP y el PSOE. Por eso, comprometidos con Andalucía, después de muchos análisis y reflexiones y con el espíritu constructivo de quien tiene ideas para ser alternativa hemos elaborado un Plan Integral Andaluz por el Empleo. Este Plan tiene dos objetivos: crear un millón de puestos de trabajo (son los que se han perdido en neustra tierra) y renovar el tejido productivo de Andalucía. El Plan se articula en cuatro ejes básicos: la reforma del mercado de trabajo, la renta básica, los recursos públicos para la lucha contra el paro y la unidad por el empleo. Esta semana se lo enviaré al Presidente de la Junta de Andalucía. Es nuestro compromiso por el empleo de los andaluces y nuestra mano tendida para ayudar a salir de la crisis.

Además del Plan, hemos llevado a cabo una serie de acciones políticas en toda Andalucía: la concentración ante las oficinas del SAE y el reparto de folletos con nuestras propuestas y la "noche en vela" por el empleo.





Creo que hemos hecho un buen trabajo. Y seguimos adelante, porque la tarea es grande y amplia. En marzo trabajaremos sobre la Deuda Histórica, porque hay que recordar que el día 20 se cumple el plazo establecido en el Estatuto de autonomía para que el estado abone la deuda a Andalucía.

Y, además, tenemos otra tarea para este mes de marzo: las Jornadas sobre las leyes municipales que celebraremos el 20 y 21 en Torrox (Málaga). Los ayuntamientos andaluces están pasando enormes dificultades y los andalucistas tenemos, también en este tema, ideas que proponer para salir adelante.

En fin, amigos y amigas, que seguimos en la brecha, que no nos damos por vencidos, que cada día estamos más seguros de que nuestro compromiso con Andalucía es una fuerza imprescindible para aportar cordura y luz en estos tiempos oscuros.

Pilar Gonzalez. Secretaria Genral Partido Andaluicista.

PILAR GONZALEZ SECRETARIA GENERAL DEL PARTIDO ANDALUCISTA

El andalucismo es un valor en alza. Más allá de los éxitos políticos y los fracasos electorales del PA, más allá de la coyuntura que lo pone de moda en estos días, más adentro de todo eso tengo la convicción y la certeza de que es necesario, de que ha sido y sigue siendo un aportación imprescindible no sólo en Andalucía, sino también en el conjunto del estado. Por eso no es sorprendente que los partidos centralistas, que tienen sucursales en el conjunto de España, proclamen su andalucismo, le añadan una “A” a sus siglas y ondeen banderas andaluzas. Algunos creen que en determinados momentos es conveniente hacer ostentación de los símbolos, como una lluvia de caramelos (chuches, al fin y al cabo) en una cabalgata de Reyes Magos, algo fugaz que deja un sabor dulce y una bonita foto.

Con mucho de maquillaje, de propaganda, de teatralización y de temporalización cuando interesa al líder o a la audiencia, se programa un show y se hace un alarde de lo que convenga. “Estamos en la sociedad del espectáculo y la política no es ajena”. Eso piensan algunos políticos. Son los que te dicen que desde Roma lo del “pan y circo” funciona. “Démosles a los ciudadanos, que son “mentes simples”, cosas complejas para que disfruten y se entretengan”.

Yo no pienso así, más bien pienso todo lo contrario, no creo en las mentes simples y acríticas que “tragan” cualquier cosa. Me interesan los ciudadanos conscientes, los que “metabolizan”, los que eligen, los que no renuncian al dolor de la lucidez. Y creo que la inmensa mayoría de los andaluces son personas de mentes complejas que tienen, además, capacidad de disfrutar de las cosas simples.

Por eso, para las y los andaluces conscientes quiero apuntar algunas claves sobre el andalucismo y que después ellas y ellos saquen su conclusión. Confío tanto en el pueblo andaluz que pongo mis palabras a su disposición para que haga con ellas lo que quiera.

Porque el andalucismo defiende, en primer lugar, la existencia de un sujeto político colectivo, la existencia del pueblo andaluz como mediación entre cada persona individual y el mundo en abstracto. El pueblo andaluz existe y es concreto. Tiene un espacio físico en el que habita, tiene pasado, presente y futuro y tiene una identidad anclada en el mestizaje y la convivencia que resulta particularmente valiosa en un mundo complejo. Los andaluces son diversos, no son todos de derecha ni de izquierda, no son todos nacionalistas ni centralistas. A algunos partidos políticos les interesan sólo “los suyos”, al andalucismo le interesan todos los andaluces.

Esa es la razón de que el espíritu de Andalucía no puede ser otro que el del 4 de diciembre. Con todo el cariño y el respeto para la ciudad nazarena y las 20.000 personas que caben en su velódromo, más allá del show (lo haga quien lo haga), el espíritu de Andalucía no es un lugar, es una fecha, es el despertar de un frío día de diciembre en el que más de un millón de andaluces salieron a la calle en todas las ciudades. Y ese espíritu no es de nadie porque es de todos, es del pueblo andaluz. Es el día en el que los andaluces pasan a ser sujeto y dejan de ser objeto o complemento circunstancial de la política en España.

El andalucismo no es la derecha, precisamente porque hay toda una historia de invisibilidad de Andalucía, de manipulación y de apropiación de nuestra identidad, una historia de sometimiento que siempre ha interesado a la derecha. Y contra ella se rebela el andalucismo y se rebelaron los andaluces el 4 de diciembre. El objetivo del andalucismo es precisamente el contrario, hacer visible a Andalucía.





El andalucismo tampoco es la izquierda tradicional, porque no ha habido un proyecto valiente y decidido para la cohesión de Andalucía desde el partido, pretendidamente de izquierda, que gobierna Andalucía desde hace casi 30 años. La política andaluza no ha tenido contenido propio desde los días fundacionales. Después nos han tapado con el mismo manto de silencio e invisibilidad. La autonomía supeditada.

Por eso, el andalucismo no es ni el PP ni el PSOE, ni sometidos ni supeditados. Nos diferencia la ideología, la cultura, la práctica política. El andalucismo sigue gritando, desde 1919 ¡Viva Andalucía Libre!

Por eso no es andalucista quien convoca las elecciones andaluzas juntas con las generales (PSOE), quien no ha pagado en 28 años la Deuda Histórica con Andalucía (PP y PSOE), quien se burla de los símbolos andaluces (Vidal-Cuadras) o de nuestra manera de hablar (Nebreda), quien pacta una financiación autonómica que no responde a nuestras necesidades (PP y PSOE), quien entiende que Andalucía es un campo de batalla para victorias partidarias (PP y PSOE), quien abandona Andalucía y se va a Madrid porque quiere hacer política (Arenas y Chaves).

No es andalucista tampoco quien pretende hacerse el amo de la Constitución. Porque la Constitución no tiene amo, es de todos, la Constitución no es una ideología, es un pacto entre todos. Y el andalucismo sí es una ideología que ya existía cuando se elaboró la Constitución, el andalucismo existía antes de quienes ahora quieren hacer suya la carta magna, que entonces no existían. El andalucismo sabe que el pueblo andaluz desbordó los límites establecidos en la Constitución y PSOE , AP y UCD no tuvieron más remedio que aceptarlo. Por eso no vale la chuche del “andalucismo constitucional”, porque empacha y no se entiende.

La crisis mas importante de todas las que nos azotan, la crisis de los valores no puede resolverse con engaños. No habrá servido para nada tanto sacrificio. Cuando alguien incluye el andalucismo en su discurso político como si fuera una chuchería, buscando la rentabilidad derivada de la fortaleza del andalucismo, está repitiendo el comportamiento del financiero Madoff .

Es cierto que Andalucía necesita un cambio, es cierto que el mundo necesita cambios. Y los cambios para que sean reales, para que sean efectivos, para que modifiquen las cosas no pueden partir del maquillaje o de lo accesorio, los cambios nacen de las convicciones auténticas. Andalucía no es Lampedusa, no creo en el cambio que pregona quien sólo pretende la impostura de “cambiar algo para que todo siga igual”. No puede liderar el cambio en Andalucía quien la considera subalterna de las decisiones que se toman en Madrid, ya sea en la calle Génova o en la calle Feraz. Los cambios saldrán de adentro, como ocurrió el 4 de diciembre, no vendrán de afuera. El cambio que necesita Andalucía es el “por sí” de nuestro escudo, es el del pueblo andaluz consciente, es el de los sones de la verdiblanca. No es tiempo de rumbitas edulcoradas, es tiempo de voces graves y comprometidas. Es el tiempo del andalucismo porque es la hora de Andalucía.

MANIFIESTO ANDALUCISTA DEL 28 DE FEBRERO DE 2010 ROCIANA DEL CONDADO

Estas son las palabras que pronunció el Secretario Local del Partido Andalucista de Rociana en el acto de celebración del Dia de Andalucía.


Queridos compañeros, compañeras y amigos todos:

Un año más estamos en esta plaza para celebrar el Día de Andalucía, izando nuestra bandera y cantando nuestro himno, en un pueblo cuyos gobernantes ni se sienten ni actúan como andaluces.

Este año venimos acompañados de una crisis que está haciendo estragos en toda Andalucía. En Rociana ya existen muchas personas que están pasando verdaderas necesidades aumentadas por un Ayuntamiento que reparte el poco trabajo que hay entre sus simpatizantes y compromisos, olvidándose de muchos padres de familia que necesitan llevar algo a sus casas.

Y no sólo se reparte injustamente el trabajo, sino que nuestro Alcalde prefiere invertir el dinero de todos en ferias, verbenas y otras zarandajas por el estilo en lugar de sumar jornales para aliviar un hambre que ya empieza a asomar la cabeza.

Es hora de devolver a Rociana la vergüenza política que perdió hace tres años y es necesario para ello que los rocianeros y rocianeras abran los ojos a la realidad y castiguen a quienes lo merecen.

Es hora de devolver a Rociana el orgullo que sintió cuando luchaba por sus derechos y hacer que quienes hoy sectariamente nos gobiernan sientan la presión de unos ciudadanos y ciudadanas que no están dispuestos a convivir por más tiempo con las injusticias sociales que estamos padeciendo en nuestro pueblo.

Es hora, al fin, de reconocer el error cometido años atrás y de prepararnos para retomar la senda de la igualdad y del orgullo de ser los protagonistas de nuestro futuro.

Nuestro Partido se ofrece como una solución con vergüenza y justicia social y nos brindamos a todos nuestros vecinos para ser sus ojos, sus oídos y sus manos que se alcen pidiendo pan, justicia y más libertad en un pueblo asustado por las represalias que puedan tomar sus gobernantes.



¡¡VIVA ANDALUCÍA LIBRE!!